miércoles, 2 de abril de 2008

¿QUÉ VES TÚ?


El contexto… fácilmente hablamos de él. El contexto físico, el contexto familiar… incluso nos inventamos nuevas formas para denominarlo como el “contexto psicológico”… ¿A qué nos estamos refiriendo cuando hablamos de contexto?

Hasta la semana pasada, tenía muy claro que el contexto era todo aquello que nos envolvía, todo aquello que de una forma u otra daba sentido a cada situación, a las conversaciones, a las acciones. Eran los aspectos físicos, emocionales, el ambiente en sí… el contexto podía influir en la manera en la que nosotros nos relacionábamos con el entorno. Sin embargo, también he oído decir en multitud de ocasiones que no es sólo el contexto el que influye en nosotros sino que nosotros mismos también influimos en él, formamos parte de él… ¿cómo estaba realmente entendiendo este concepto? ¿Lo entendía? Nunca me había parado a pensar que el contexto pudiera ser algo interno al individuo… ¿podríamos decir algo subjetivo? ¿Dependiente de la perspectiva de cada uno, dependiente de su manera de interpretarlo?

Desde mi nuevo punto de vista, entiendo que el contexto implica todo aquello que ayuda a generar un clima en el que desenvolvernos. Puede ser el espacio físico, puede ser también el cómo nosotros interpretemos la situación y puede incluso ser el significado que le demos nosotros mismos a todo cuanto nos rodea, desde una celda vacía hasta una clase llena de gente, una palabra, una mirada… ¿Por qué interpretamos todo cuanto nos rodea? Quizá, porque estas interpretaciones nos ayudan a la vez a desenvolvernos en el medio, con las personas…

Lo que quiero decir con todo ésto es que si el contexto es en gran parte, por no decir la parte principal, aquello que nosotros mismos creamos, la interpretación que nosotros hacemos de las situaciones en concreto y de la realidad que nos rodea en general, influirá inevitablemente en la manera en la que nos relacionemos con el mundo, con el resto de personas.

Y hablando de habilidades sociales… ¿qué importa si soy capaz o no de adaptarme a los diferentes contextos si no soy capaz de controlarlo, es decir, si no soy capaz yo misma de crear esos contextos en los que pueda utilizar todas mis artimañas y desenvolverme con soltura? Creo en este momento, que no importa ya tanto lo que sabemos o no hacer, el que sepamos o no abordar una situación, contener a una persona, manejar las circunstancias, sino que lo que importa es enmarcarlas en contextos que nosotros controlemos, en los que sepamos trabajar y sobretodo en los que tengamos suficiente confianza como para ayudar a otros o al menos para comprenderlos.

En mi opinión, deberíamos empezar siendo sinceros con nosotros mismos, siendo realistas y ponernos firmes ante ésto. ¿A qué me refiero? Me refiero principalmente a que si sabemos que podemos cambiar el contexto (podemos cambiar nuestra interpretación de la realidad, de las situaciones en las que nos encontramos inmersas), ¿por qué utilizamos en multitud de ocasiones la excusa de “me siento de esta manera por este motivo o por este otro”, “No puedo hacer nada” “Me rindo” “Esta u otra situación me hace sentir mal… por eso quizá me comporto de esta manera con las personas… Hoy es un mal día”? etc. etc. etc. ¿Por qué no somos capaces en estos momentos de interpretar el contexto de una forma diferente? ¿Por qué nos empeñamos en convertirnos en víctimas de nosotros mismos?

Creo firmemente y cada día más, que cada persona es capaz de por lo menos intentar salir de cada situación, de controlar sus emociones y de ganarles la partida. Creo que cuando somos capaces de plantarnos ante la situación y decidir cómo queremos que sea, decidir cómo queremos interpretarla, controlamos la situación, controlamos nuestros impulsos y por lo tanto controlamos la manera de relacionarnos con el mundo.

No voy a decir que el que está mal es porque quiere (aunque sé que muchos lo habían leído ya entre líneas) pero sí creo que nuestra forma de interpretar nuestra propia mirada al mundo nos condiciona en nuestras relaciones con los demás. ¿Por qué no intentar siempre interpretar la realidad de forma que nos ayude a seguir caminando en lugar de crear contextos que nos obstaculicen el camino?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Si Mary, pero creo, que posiblemente las interpretaciones que tenemos son diferentes porque anteior, está la Percepción, si lo percibimos de manera distinta y tu imagen lo ejemplifica, la foto que has escogido: ¿ qué vemos? la vieja, la joven..¿en qué nos fijamos? pues ésto puede influir en la contextualización que hagamos
¿ no?

BSS

Ana dijo...

Creo que con saber que la realidad es diferente para cada uno en función de sus experiencias es suficiente. Si a demás sabemos en que medida estamos nosotros (cada uno) siendo influidos por nuestras experiencias previsa y de qué manera influye esto en nuestras interpretaciones mejor que mejor. Un beso

Anónimo dijo...

Hola Mary:

Creo que lo que dices esta relacionado con lo de la indefensión aprendida, en el sentido de que no podemos hacer nada ante algo que nos incomode o ante algo que no nos guste.

Yo lo comparo un poco con los dias de lluvia, hay mucha gente que no les gusta, que se deprimen, que dicen que es un mal dia en cuanta ven una gota caer, y yo en muchas ocasiones me identifico con ellas, pero todo es depende de como lo veamos, de que razonemos el que nos pone tristes o deprimidos, por ejemplo, si pensamos que nos deprime el día tan gris tal vez podamos ponernos ropa de color más vivo y asi alegrar el gris de las calles, sin pensamos que todo va a ir mal porque siempre pisas los charcos y acabas con los pies calados pues comprate unas botas de agua y sal a disfrutar.

No se, creo que podemos contestar con cosas, que podemos modificarlo, crear el clima necesario para que, por ejemplo otra persona se sienta tranquila cuando nos cuenta su problema.

Pero tambien hay que tener en cuenta que la persona que tenemos en frente puede interpretar el contexto como quiera, y que tal vez, lo que nosotros modificamos, la otra persona a lo mejor no es que no lo perciba sino que tal vez no le ha prestado atencion.

Creo que las relaciones entre las personas son complicadas porque simplemente no somos robots, no sabemos que si damos a una tecla determinada va a reaccionar como se espera, sino que posiblemente salga con algo imprevisible.

Asi pues, y ya para terminar creo que es importante el conocernos a nosotros mismos, y el buscar una explicación para aquello que nos provoca sensaciones tanto negativas como positivas, puesto que hay estara el secreto de poder disminuir o aumentar la posibilidad de que pueda volver a ocurrir o no.

Besitos Mary!!! espero no haberte aburrido mucho.

LARA

Anónimo dijo...

Gracias a todos por vuestros comentarios, me anima aseguir ecrbiendo ver que mis compis me leen y contestan.

Lara, estoy de acuerdo contigo con lo de empezar conocíendonos a nosotros mismos. es lo que yo últimamente llamo comenzar por ser sinceros con nosotros mismos.
Como tu dices, cuando somos capaces de poner los puntos sobre las ies, ser sinceros y reflexionar acerca de nosotros mismos, de aquello que nos hace sentir bien o mal y por qué, podemos empezar a tomar decisiones con respecto a quien lleva las riendas de nuestras vidas. Lo que quiero decir es que solo cuando seamos sinceros podremos decidir si queremos que la situación decida por nosotros o bien seamos nosotros los que tomemos las riendas de nuestra vida.

Un besito y muchas gracias a todas!